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Los bandidos
Los bandidos
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Guía de Arrakis para jóvenes señores — Capítulo XXIV: Conoce a tu enemigo: Los saqueadores Hay que reconocer que, de todos los personajes deleznables que un joven noble se puede encontrar en la frontera, los saqueadores de baja alcurnia son la menor de las amenazas; tan solo destacan por sus implacables ataques al olfato. De hecho, los saqueadores se parecen mucho a sus asquerosos y sudorosos primos urbanos, los mendigos, salvo por el hecho de que no te puedes librar de los saqueadores lanzándoles un par de monedas o acelerando el paso. Al igual que otros carroñeros que se alimentan de los huesos de la guerra, el saqueador tiende a aprovechar las postrimerías del conflicto; calcula muy bien los infortunios de los demás para cosechar cualquier recompensa llameante que caiga del cielo. Por suerte, los saqueadores no son agentes del imperio, así que pueden ser masacrados a voluntad. Sin duda, matar a un par de saqueadores cuando llegan a la frontera es una práctica excelente para los jóvenes nobles, ya que, gracias a ellos, los aventureros novatos se pueden familiarizar mejor con el armamento a la par que mantienen la población local a raya. Guía de Arrakis para jóvenes señores — Capítulo XXIV: Conoce a tu enemigo: Los kirab Si los saqueadores ocupan el escalafón más bajo en la jerarquía de bandidos de la región, los kirab deben de ser la siguiente facción más peligrosa en el ecosistema local de villanos; aunque es un «peligro» relativo. Los kirab no están más adiestrados o equipados que un saqueador medio. No obstante, los kirab compensan sus carencias a nivel de experiencia y trampas con una agresiva actitud hacia todo lo que tomen a la fuerza. Se recomienda que los jóvenes señores que no vayan acompañados eviten todo contacto con los kirab hasta que hayan dominado las siete primeras formas de pelea con espadas y hayan demostrado una competencia básica con las armas de fuego. Al igual que las quintas y sextas hijas en edad de casarse, los kirab operan en grupo y demuestran una ferocidad similar en su desesperación por cobrarse una presa. No obstante, a diferencia de la hijas de más, la eliminación de los kirab sí está permitida y, de hecho, se anima a ello. Las cabelleras con elementos reconocibles de los kirab se están convirtiendo en recuerdos muy populares, así como en un tema ideal para iniciar conversaciones entre los nobles jóvenes más aventureros. Guía de Arrakis para jóvenes señores — Capítulo XXIV: Conoce a tu enemigo: Los esclavistas El debate sobre la legitimidad de los esclavistas como objetivos tiene consideraciones prácticas desde ambos bandos. Aunque generalmente se considera mala praxis asesinar a los agentes del comercio de esclavos, la identificación precisa de objetivos es un lujo del que no se suele disfrutar en el campo de batalla. Huelga decir que la vida de un aristócrata siempre estará por encima de la de un esclavista común. Sin duda, cuando las posiciones se invierten, el esclavista no duda en encadenar o asesinar a cualquier joven noble de las tierras baldías. A fecha de la publicación, las presiones políticas en torno al prolongado proyecto de Neo-Carthag han forzado a los esclavistas a aumentar significativamente sus plantillas. Por tanto, esta guía recomienda firmemente que los jóvenes señores que no vayan acompañados disparen siempre primero y que tan solo identifiquen al objetivo cuando se haya disipado el humo. Siempre se pueden criar o contratar a más matones sin cara para arrear maula, pero nuestros jóvenes nobles han de ser protegidos y cuidados, pues son el futuro del Imperio. Guía de Arrakis para jóvenes señores — Capítulo XXIV: Conoce a tu enemigo: Los desertores Más allá de los soldados de las casas, que están activamente sumidos en la Guerra de Asesinos entre la casa Atreides y la casa Harkonnen, los desertores de esa guerra son los villanos más peligrosos y desesperados que se pueden encontrar en los áridos parajes de Arrakis. Como sus antiguas formaciones militares les están dando caza de forma implacable, estos renegados rara vez salen de su escondite; eso no quita que incluso el desertor de más baja calaña posea un entrenamiento básico en tácticas de combate y emboscadas. Es posible que los veteranos más curtidos hayan desertado de algún rango de oficial en sus antiguas Grandes Casas y que, por tanto, posean un entrenamiento avanzado como espadachines o armas de fuego. Por desgracia, su reputación como guerreros curtidos en batalla no ha hecho más que aumentar el atractivo de los desertores para los cazadores de trofeos. Entre los coleccionistas, son cada vez más populares los álbumes de retazos de piel con tinta militar y dedos cortados. No obstante, por muy tentadores que puedan parecer estos trofeos, recomendamos fervientemente que los aventureros inexpertos o que no vayan acompañados se mantengan lejos de los graben y de otros lugares oscuros si no cuentan con aviones de combate o apoyo de armamento pesado. |
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