Cuidaos de los focos que iluminan la noche, extranjeros. Aunque en las tierras baldías se hable de los Sardaukar, los rumores de las hogueras de campamento tan solo son ciertos en parte. Los aviones de combate van pilotados por capitanes Sardaukar, pero las escuadras de asalto están formadas exclusivamente por mercenarios de la CHOAM, una colaboración inusual que permite a las tropas de choque del emperador actuar en situaciones que de otra forma les estarían prohibidas.

No es ningún secreto que la legión imperial Sardaukar es el auténtico poder que sustenta la voluntad y autoridad del emperador. Esta secta guerrera plenamente adoctrinada está consagrada a satisfacer todo deseo violento del emperador.

Durante siglos, los Sardaukar tuvieron prohibido desplegarse en Arrakis bajo ninguna circunstancia, pues se temía que su presencia trastocase el delicado equilibrio entre el emperador, el Landsraad y la Cofradía Espacial.

Tan solo el caos provocado por la Guerra de Asesinos ha logrado forzar al Landsraad a aceptar la presencia de los Sardaukar en Arrakis, aunque bajo la estricta condición de que su despliegue quede reservado a situaciones en las que el flujo de especia se vea amenazado de forma inminente. Eso sí, los parámetros de dicha condición han resultado muy fáciles de alterar...

Majestad:
El centro de formación de Sardaukar en Arsunt ya casi está terminado. La construcción ha tardado el doble de lo previsto, pues los requisitos únicos y esotéricos del diseño del zigurat presentaron muchos desafíos. De no haber asignado un equipo específico para la compleja matriz de plataformas de sacrificio y la red de canalizaciones de sangre asociada a ella, las obras aún proseguirían.

Una vez lleguen a su destino en la guarnición el comandante Aramsham y su legión, podremos comenzar en serio la campaña contra los fremen. Los informes de inteligencia indican que tan solo son unos pocos cientos de miles y únicamente un reducido porcentaje están en edad militar.

De todas formas, no debemos subestimar a este salvaje enemigo. Al igual que las duras condiciones de Salusa Secundus han modelado a los Sardaukar hasta convertirlos en una fuerza letal, no cabe duda de que el implacable entorno de Arrakis habrá fortalecido de una forma similar a nuestros adversarios.

El maestro de armas imperial recomienda emplear gas nervioso.